A fines del año pasado egresó de la Academia Politécnica Naval, en Viña del Mar, y se convirtió en la primera piloto naval en los más de 200 años de historia de la Armada de Chile. A bordo del avión PC-7 Pilatus, lleva a cabo rescates y aeroevacuaciones médicas, además de combatir la contaminación marítima y sobrevolar la zona económica de Chile para detectar casos posibles de pesca ilegal, contrabando y narcotráfico. En caso de conflicto, la teniente estará facultada para apoyar a los buques de la escuadra nacional en la identificación de submarinos o buques de superficie adversarios. Antes de su formación como piloto, cursó cuatro años de estudios en la Escuela Naval. Entre 2017 y 2018 formó parte del Patrullero de Servicio General PSG-73 “Isaza”, en Puerto Williams.