Lidera el área social y de participación de los proyectos de Rehabita, organización fundada en 2015 que recupera espacios urbanos deteriorados, con soluciones integrales que potencien el capital cultural, económico y social de cada lugar. “Nace del interés de recuperar espacios con un valor identitario”, dice Florencia. Estudió sociología en la Universidad Alberto Hurtado y su objetivo tiene que ver con que los espacios rescatados se conviertan en una oportunidad de desarrollo para la comunidad. Hoy trabajan en un proyecto en Casa Lamarca, una casona abandonada en Melipilla, para convertirla en un centro de eventos. “Me gustaría que la fundación se convierta en un referente de cómo hacer las cosas de una manera diferente”, dice.