Daniel Sepúlveda León
Dentista
Elegido en el año 2010
"Un niño burundés de 8 años llegó al hospital en un estado de extrema gravedad; no podía caminar y el pronóstico era su muerte. Tras 2 meses de tratamiento, corre y juega como un niño más, es increíble las fuerzas y las ganas de vivir que tienen allá los niños", dice Sepúlveda, y ejemplifica así su trabajo. Odontólogo de profesión, encabezó una aventura solidaria que lo llevó hasta Burundi en África, al Hospital de Nueva Esperanza, para atender a unos 3 mil niños y 2.500 adultos, en su mayoría portadores de sida y enfermos de malaria.
El odontólogo, quien también es voluntario del programa Acogida del Hogar de Cristo, dice que "no hay que estar en África para ayudar, es cosa de bajar las revoluciones y observar lo que pasa a nuestro alrededor". Actualmente intenta proyectar su viaje a alumnos de la U. del Desarrollo, de donde egresó.