Es el creador de Prey, una aplicación para rastrear y recuperar computadores y teléfonos robados que ha sido mundialmente reconocida: ha aparecido en el New York Times, el Washington Post y la BBC. Además, fue nominado Proyecto Bicentenario por El Mercurio en 2010 y ganó el People’s Choice Award en The Next Web en Holanda, en 2011, y el premio Pyme Innovadora del gobierno de Chile en 2012. Aunque su título dice periodista de la Universidad Católica, Tomás es algo así como un inventor digital. Desarmaba computadores desde chico y su carrera en la web empezó a los 22 años cuando compuso un disco y abrió un blog para subirlo. Aún estudiando, fundó su primera empresa, la agencia web Aardvark Labs, con su primo Leo Prieto, quien después crearía FayerWayer. De las letras pasó al código, y creó proyectos como el portal de propiedades Tugar.net, el mosaico de noticias Dixit.io y un Spotify para música de juegos llamado Muki.io. También creó Bootic, un e–commerce para pymes. Prey tiene cerca de 10 millones de usuarios y Tomás, después de cuatro años viviendo en San Francisco, volvió a Chile hace unos meses y se instaló en Valdivia.