Tiene un 70 por ciento de ceguera progresiva y está detrás del emprendimiento Recimunkun, que busca reducir los residuos plásticos, haciendo arte con el reciclaje: elabora, por ejemplo, animales en peligro de extinción a partir de bolsas plásticas. Es de Pellín, de la comuna de Llanquihue, y prepara talleres para promover su técnica en personas con discapacidad de su comunidad y zonas aledañas, para crear una nueva fuente laboral para jóvenes sin oportunidades de trabajo. “Me motiva dar a conocer la problemática de los desechos a las personas comunes y corrientes, porque me he dado cuenta de que se desconoce mucho del tema, tanto de la contaminación humana como de los animales en peligro de extinción”, dice. “Creo que las cosas se pueden cambiar y lo trato de demostrar a través de mis trabajos, qué están hechos por un discapacitado”.