Motivados por el potencial de la cerveza artesanal, en 2016 estos chillanejos apostaron por emprender en el rubro, y tres años después fueron galardonados como la mejor cervecería de Chile en la octava versión de la Copa Cervezas de América, realizada en Valparaíso. El premio destacó el inédito trabajo colaborativo entre Prócer, la cervecería de los hermanos Carrasco, y las bodegas Ergo y Hasta Pronto, las cuales desarrollaron en conjunto una propuesta de grape ale, un híbrido entre cerveza y vino también premiado en su categoría específica. Los reconocimientos, sin embargo, habían comenzado a llegar antes para Camilo y Nicolás: en 2017 obtuvieron el tercer lugar en la misma competencia, mientras que el año siguiente recibieron medallas de bronce en la Copa Cervecera del Pacífico, en México, y en la Copa Latinoamericana de Cervezas Artesanales, desarrollada en Perú. El objetivo de ambos, explican, es “poner a Chillán en el mapa de la cultura cervecera”. Aunque la pandemia redujo a la mitad los siete mil litros que vendían mensualmente y detuvo el proyecto de instalar un bar propio, están lejos de desanimarse. “Si hacemos las cosas con pasión, todos podemos ser un prócer”, dicen.