Analizando cebollas, manzanas y frutos rojos, esta doctora en Biotecnología de la Universidad de Santiago descubrió moléculas presentes en estos alimentos que pueden prevenir el alzheimer, que no tiene cura. La investigación, realizada desde el Centro Internacional de Biomedicina, fue publicada en el Journal of Alzheimer’s Disease. Hoy está en proceso de desarrollo y esperan poder ofrecerla a la población como un nutracéutico preventivo para esta enfermedad. Camila se ha especializado en la investigación de estos fármacos de origen natural, descubriendo también efectos preventivos para la hipertensión en el calafate, lo que fue su tesis doctoral. Haber crecido en el campo, cerca de Temuco, y tener orígenes mapuches fue su primer acercamiento a esta área de la ciencia. “En la cultura mapuche se conocen mucho las plantas medicinales, yo ya conocía de eso, pero mi interés afloró más aún cuando ya lo pude aplicar con mis estudios”, dice.