Crearon una órtesis con forma de guante e imanes que facilita la vida cotidiana de personas que no tienen manos funcionales, especialmente con mano en capullo por piel de cristal. El proyecto lo llamaron Oliber y hoy se exporta a más de 18 países, entre ellos Canadá, Estados Unidos, España, Suiza, Bélgica, China, Australia y otros. En Chile lo utilizan más de 200 personas, y el año pasado obtuvieron el séptimo lugar entre 6 mil participantes en el IBMC de Silicon Valley. La idea partió cuando Bárbara y Camila se conocieron en el programa de innovación dLab, de la UDD, donde ambas estudiaron Diseño. En el camino se dieron cuenta de que la órtesis podía ayudar también a personas con artritis, esclerosis múltiple, lepra, amputados y con secuelas por quemaduras. Con Oliber han participado en la Ideatón de Teletón, han ganado fondos de Corfo y Jump Chile, fueron a la Bienal Iberoamericana de Diseño España y este año viajaron a Alemania, a la Dutch Design Week.