Nacida en Estados Unidos, de padre chileno, se convirtió este año en la primera tenista nacional en ganar un torneo de la WTA, la organización principal que rige los torneos y el circuito profesional del tenis femenino a nivel mundial. Lo hizo en categoría dobles, junto a su compañera norteamericana Desirae Krawczyk, en el torneo de Gstaad en Suiza. En su carrera ha ganado 19 títulos Challenger en dobles, donde llegó a ser 74º del mundo en esa categoría, el puesto más alto para una doblista en la historia del tenis femenino chileno. En su etapa juvenil llegó a estar entre las cuatro mejores de Estados Unidos, país donde se formó en las canchas de Destin, Florida. Luego de su nacionalización en 2015 y de la recuperación de una grave lesión que casi terminó con su carrera, comenzó a formar parte del equipo chileno de Copa Fed representando a Chile junto a Daniela Seguel, con quien obtuvo medallas de oro en los Juegos Bolivarianos y el Sudamericano de Cochabamba.